CANTOS PARA DANNY
La libertad, si sabe a
chocolate,
yo detesto el chocolate.
Amo la rosa que en cenzontle dejó de cantar.
yo detesto el chocolate.
Amo la rosa que en cenzontle dejó de cantar.
Pequeños dardos de ciruelas crecían en tus orillas...
Allá las neblinas de tus besos cubrían las enredaderas
casi como un milagroso aroma presentido.
¿Cómo voy a callar ángel perdido si el filo de tus alas es mi olvido?
Hay silencios que suceden en la
tristeza,
en los lagos, en los caminos.
En los cines no sucede gran cosa.
en los lagos, en los caminos.
En los cines no sucede gran cosa.
En las historias que evoco hay heroicos momentos;
luchas con abismos, cataclismos y tornados.
Una marcha de Keynes,
lenta, roja;
densamente extingue mi cuerpo.
densamente extingue mi cuerpo.
Estuve en los pasillos
bebiendo a sorbos
cautelosamente cuatro muertes.
cautelosamente cuatro muertes.
Préndeme amor, vierte en mi
rostro la finitud...
temo al besar tus labios
traer a mí también tus alas obscuras.
temo al besar tus labios
traer a mí también tus alas obscuras.
Siéntate ahí, ajeno al
mundo...
pídeme que te acompañe como un secreto...
Nadie conoce el roce de tu inocente mirada
que evade como un gato mis preguntas ciegas.
Nadie conoce el roce de tu inocente mirada
que evade como un gato mis preguntas ciegas.
Alfredo Jiménez Torres
México
México
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